lunes, 24 de agosto de 2009

Un monte FUJI lejano.

Fuji Sunrise Kawaguchiko 2025 WP




Hoy me he sentado en el diván
el especialista me ha preguntado por mi sintomatología.


-Doctor
Sufro de tristeza
y de pena honda
lloro por las esquinas de mi casa
me siento a oscuras en las escaleras
me ha vuelto gato
ni se me oyen las pisadas de silenciosas que son cuando camino
dejo las persianas cerradas en rejillas
como si la casa estuviera abandonada o asustada.

Cojo un libro, lo dejo
pongo la radio, la quito
escucho música repetidamente
como un autómota
me alivia momentáneamente
ese peso en el pecho
.


-Doctor
Me asustan y me ahogan los despertares
necesito respirar profundo
creo que me da miedo la vida.
Estoy tan cansada, tan cansada
que a veces pido morirme.
También tengo dolor físico
por todas partes, la cabeza, la espalda...
Ese dolor que camina y no reposa.


-Doctor
Me siento sola
perdida
abandonada
nada
una Nada que me traga.
Me pregunto qué sé hacer bien y dudo.
No tengo amigas. Una vez tuve una. Hubiese dado media vida por ella.
Si alguien no tiene amigos íntimos, malo.



"El doctor escribe sin inmutarse; es un buen profesional.

No sé si explicarle algo más o espero a que él me pregunte."


La bruma lo envuelve todo.

¡El monte Fuji está tan lejos!


.

No hay comentarios: